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Irak: la memoria de corto plazo

Erbil, Irak. ¿Cómo es posible que el sufrimiento de toda una nación pase al olvido en unos cuantos años? Hace 1 década, Irak estaba lleno de corresponsales extranjeros, observadores internacionales y miembros de los grupos de derechos humanos. Ahora esa realidad cedió el paso a otra donde lo que sucede en esta nación ya no es noticia. La violencia ahuyentó a muchos defensores internacionales de derechos humanos y las agencias de prensa prácticamente abandonaron Irak y se mudaron de país.

La vida cotidiana en medio del narcotráfico

En el pasado, era un lugar común pensar que la violencia del narcotráfico sólo tocaba a quienes se atrevían a meterse con él. La creación de narcoestados o narcolocalidades ha vaciado de contenido esa noción.

El declive del Z-40

El gobierno del presidente Enrique Peña Nieto va a destacar como un logro fundamental de su primer año de gobierno la captura de Miguel Ángel Treviño Morales, el Z-40, conocido como el mando principal de Los Zetas, la organización criminal fundada por exmilitares y famosa por su nivel de violencia y brutalidad.

El último bastión: la Ciudad de México

Comandos armados secuestran jóvenes en antros, un informante de la agencia estadunidense antinarcóticos (DEA, por su sigla en inglés) asesinado a plena luz del día, un general acribillado, un tiroteo entre grupos rivales de la Policía Federal, convoyes militares que viajan por la ciudad preparados para el enfrentamiento, empresarios extorsionados por grupos criminales. No estamos hablando de Reynosa, Matamoros (Tamaulipas) o Monterrey (Nuevo León). Estamos hablando de la capital de la República Mexicana.

La ignorancia presidencial en los temas militares

Antes de aceptar el grado de general de cinco estrellas, los presidentes mexicanos deberían tener al menos nociones sólidas de temas estratégicos, políticas de defensa, planeación y presupuestación militar, sistemas modernos de armamento, además de rodearse de asesores expertos en el tema militar. Lamentablemente no ha sido así, y las consecuencias de la ignorancia de un presidente en temas de defensa siempre han sido graves.

Saliendo del desastre en los servicios de inteligencia

El gobierno de Enrique Peña Nieto está tratando de paliar el aparente desastre en materia de servicios de inteligencia que dejaron los gobiernos panistas en los últimos 12 años: falta de presupuesto, personal inexperto, investigaciones abandonadas, inexistencia de estrategias de largo plazo.

Las nuevas tendencias de violencia contra periodistas en México

Del mismo modo que los gobiernos corruptos que se sienten amenazados por las investigaciones periodísticas, los grupos criminales mexicanos están tratando de silenciar a los medios de comunicación o de convertirlos en caja de resonancia para sus intereses durante los enfrentamientos entre sí o con las fuerzas federales.

Corrupción de generales, sospechas no confirmadas

El reportaje del diario The New York Times –firmado por Ginger Thompson, Randall C Archibold y Eric Schmitt sobre la presión estadunidense para impedir la designación del general de División Moisés Augusto García Ochoa como secretario de la Defensa Nacional– reveló los niveles de desconfianza, temores y presiones que persisten en la relación México-Estados Unidos, y al mismo tiempo la prolongada sospecha de la Agencia Antidrogas estadunidense (DEA, por su sigla en inglés) sobre la corrupción en la cúpula militar mexicana.

Una nueva edición de la estrategia militar contrainsurgente

Aunque el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto impulsó la Ley de Víctimas y se ha separado de los estragos de la violencia generada durante el sexenio pasado, las Fuerzas Armadas, particularmente el Ejército, han estrechado filas para enfrentar una nueva etapa del conflicto armado que sostienen contra las bandas de narcotraficantes y otros grupos de la delincuencia organizada.

Las viejas políticas y los nuevos altos mandos militares

Durante décadas, los presidentes mexicanos han hecho caso omiso de la necesidad de unificar a las Fuerzas Armadas en una sola estructura y en una sola entidad administrativa. Aunque eso no erradicaría por completo las rivalidades entre mandos y objetivos militares, sí reduciría su campo de posibilidad. Unificar a las Fuerzas permitiría sentar las bases de una política de defensa, equilibrar los recursos de los ejércitos de tierra, mar y aire, diseñar la fuerza militar que el país necesita y definir una política militar acorde a los objetivos nacionales.