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Política petrolera acelera declinación de los yacimientos de México

Política petrolera acelera declinación de los yacimientos de México

Ahora es oficial: en el documento Criterios generales de política económica para la iniciativa de ley de ingresos y el proyecto de presupuesto de egresos de la federación correspondientes al ejercicio fiscal 2015, que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) presentó a la Cámara de Diputados, se anticipa que la producción petrolera de 2015, enfrentará una “importante caída”.

Como consecuencia, continúa la Secretaría: “los ingresos petroleros se verán afectados por la declinación importante de la plataforma de producción de crudo” y “se generarán faltantes de ingresos” y, otra vez, por tercer año consecutivo, pide a los diputados que le autoricen contratar más deuda. Transcribimos: “así se propone financiar con déficit el faltante de ingresos para suavizar la trayectoria de gasto y no afectar la dinámica positiva [sic] que ha venido observando la economía mexicana”.

El presupuesto de 2015 será deficitario, el gasto corriente, uno de cuyos renglones más preocupantes es el de Policía y Ejército, será financiado con nueva deuda, deuda que, desde que se inició el actual sexenio, se incrementa.

En un intento de endulzar la información, la SHCP asegura que las caídas de la producción aceitera y de los ingresos petroleros serán “transitorias”.

El papel de Pemex

En 2015 Petróleos Mexicanos (Pemex) continuará siendo el mayor contribuyente fiscal de México. La SHCP espera que los ingresos petroleros alcancen 1.2 billones de pesos, que equivalen al 26.23 por ciento del total de la recaudación pública, pero la caída en la extracción de Pemex para 2015 impactará, se estima, en una reducción del 7 por ciento dichos ingresos petroleros.

Por la magnitud de la contracción, que podría fluctuar entre 150 mil y 200 mil barriles diarios de crudo en la plataforma petrolera, en términos físicos y cuyos impactos en los ingresos presupuestados del sector público serán más graves por la caída de los precios en el mercado internacional, algunos columnistas como Alicia Salgado lo llaman un “minishock”.

El problema del agua: 20 por ciento

Como dijimos, se pretende minimizar el problema. La explicación oficial es que como resultado “natural” del envejecimiento de los campos, ocurre un problema menor y pasajero: la entrada de agua a algunos pozos, sobre todo de Cantarell.

La periodista Karol García en el diario El Economista, profundizando en el tema, informó, con base en una consulta por medio de la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, que la irrupción de agua a los pozos es un problema que viene aumentando y que, en la actualidad, casi el 20 por ciento de la extracción, es decir, uno de cada cinco barriles, es agua mezclada con el aceite (http://eleconomista.com.mx/industrias/2014/08/26/sin-freno-filtracion-agua-crudo-pemex).

Descontrol del agua, por falta de inversiones

En realidad, la declinación de los campos petroleros de México se explica por diversos factores. El más importante es la política de acelerar la extracción para mantener el enorme flujo de dólares que la actual coalición en el gobierno requiere para conservar el poder. Incluso el descontrol del agua es sólo una consecuencia de la política de ahorrar en inversiones necesarias y despilfarrar los ingresos petroleros.

Conforme avanza la explotación, el vacío que deja el yacimiento, por una ley de la física, es ocupado por agua, cuyo nivel aumenta en el interior de los pozos; pero, con inversiones oportunas, pudo aminorarse el problema, construyendo plantas deshidratadoras (reciben y separan el agua); pero como impera en este país una política depredadora, los ingresos petroleros, que debían parcialmente dedicarse a esas necesarias inversiones, se desviaron para otros gastos.

Expresiones de la sobreexplotación

Parecería que, con el gobierno de Enrique Peña, lo que podría llamarse el hambre de petrodólares empeoró.

Veamos algunos ejemplos. Apenas en el primer año de gobierno se duplicaron los equipos para extraer petróleo en los dos más importantes campos petroleros de este país: los complejos Ku Zaap Maloob y Cantarell, ambos aportan casi el 40 por ciento de la producción nacional.

La estadística muestra que, con respecto del último año de Felipe Calderón, el de Peña ha duplicado los equipos de perforación para ampliar la extracción (ver cuadro 1).

La consecuencia, al parecer, es que en el actual gobierno se ha iniciado la declinación de Ku Zaap Maloob, el más importante complejo del país.

En el cuadro 2 resumimos su historia de producción en los últimos años del sexenio pasado.

En el gobierno de Peña se rompió la meta anunciada de 850 mil barriles y se incrementó la extracción.

Así, en octubre de 2013, se alcanzó la cifra que al parecer marcará el pico de Ku Zaap Maloob: 860 mil barriles diarios.

Un aumento de 10 mil barriles parece poco significativo, pero si consideramos los precios entonces vigentes de casi 100 dólares por barril, suman 1 millón de dólares cada día.

Los nuevos ingresos no les duraron mucho. El cuadro 3 muestra el comportamiento de Ku Zaap Maloob hasta julio de este año.

En el cuadro 4 desagregamos las cifras por campos, mostrando el volumen perdido por cada uno de ellos. El objetivo es una primera aproximación a la magnitud de la caída física en este minishock.

Es importante advertir que el cuadro sólo muestra la caída durante lo que va de 2014.

Empieza mostrando que el campo Ku ha perdido entre enero y septiembre más de 25 mil barriles. En esta nota no pretendemos una reseña completa, pero tiene importancia recordar que Ku se encuentra en el umbral de la madurez, es decir, el punto en que la mitad de su reserva ha sido extraída e inicia la segunda mitad de su vida. Ésta es la etapa que, como en la de los seres humanos, se padecen problemas de salud (el agua es uno de ellos, la presión, otro). El comportamiento de lo que le queda de vida es más incierto y no es fácil formular proyecciones, como en campos petroleros jóvenes.

El cuadro también muestra que, acaso, ha comenzado la declinación de Zaap, es decir, ahora el único campo que aún puede crecer es Maloob.

Pero la conclusión principal es que ya ni sobreexplotando este sobreviviente se puede compensar la caída cotidiana del gran complejo. Por el momento la caída en Ku Zaap Maloob es suave, la pérdida es del 3 por ciento respecto al pico, pero de continuar la misma política, como es probable, la pendiente se incrementará.

El cuadro 4, que muestra las cifras desagregadas por campo, comprueba que la aceleración de la producción ha provocado el colapso de Sihil, en Cantarell.

Entre enero y agosto de este año, el campo Sihil ha perdido más de 35 mil barriles diarios. En enero estaba produciendo 80 mil 933 barriles; en agosto 45 mil 325, es decir ha perdido el 44 por ciento; si tuviéramos en este país políticos interesados en los grandes problemas nacionales ya estarían discutiendo y examinando esta política de explotación desenfrenada.

El mismo cuadro muestra a continuación el caso de Akal, que en este gobierno cruzó la línea por debajo de los 200 mil barriles diarios, y que sólo entre enero y agosto perdió un 10 por ciento.

Delta del Grijalva

Éste es otro caso muy interesante, porque existen estudios específicos para demostrar que en algunos de sus campos los factores que controlan los volúmenes a recuperar son los ritmos de explotación, debido a que ellos alteran la eficiencia del flujo a nivel interno del yacimiento. Es el Delta del Grijalva el proyecto más importante en Tabasco por sus volúmenes y crecimiento pujante. Los principales campos que lo integran son: Sen, Caparroso Pijije Escuintle y Tizón.

El segundo de la lista, Caparroso Pijije Escuintle, en 2011, produjo 64 mil barriles de aceite; en 2012 cayó a 45; y en 2013 (el primer año de Peña), a sólo 27 mil barriles, es decir, en 3 años ¡perdió más de la mitad!

El cuadro, insistimos, no pretende un análisis general, sino sólo ilustrar la caída entre enero y agosto de este año, cuando ha estallado la crisis de la producción. Pero los interesados pueden ampliar información con el Reporte de 2014 de Pemex a la Secretaría de Energía, y con nuestro artículo en Contralínea sobre la problemática del campo Tizón, afectado por el cambio climático, la destrucción de arrecifes y otros humedales. En fin, son ejemplos de que la situación actual es causada por varios factores y no sólo por la irrupción del agua.

Se trata de ofrecer datos duros que permitan una discusión informada de la nueva situación.

Para finalizar unas líneas sobre Chicontepec, para ilustrar con otro ejemplo, en los campos de Agua Fría donde Pemex ha perforado más de 1 mil pozos, la caída es de más del 50 por ciento; y de ninguna manera se explica por irrupción de agua, sino que Pemex Exploración y Producción (PEP) durante todo 2013 y lo que va del año actual reorientó la inversión concentrándose en algunos pozos con largos tramos horizontales y multifracturas, para demostrar a los inversionistas extranjeros que esas técnicas podrían elevar la producción y lograr altas tasas de retorno. En consecuencia, Pemex, concentrado en los experimentos con fracking, prácticamente se retiró de Chicontepec, donde, al contrario de los casos mencionados de Ku Zaap Maloob y Cantarell, el número de equipos de perforación se redujo en un impresionante 66 por ciento: habían 36 rigs en 2012, y en 2013 sólo operaron en promedio 12 plataformas de desarrollo. El dato anterior demuestra que la privatización fue perfectamente planeada. Pemex virtualmente se había retirado de Chicontepec desde el comienzo del actual gobierno y no como resultado de la reforma energética.

Desde luego este volumen de pérdida de alrededor de 200 mil barriles al día se incrementará al final de 2014 y continuará creciendo en 2015.

Pero no debe olvidarse que será parcialmente compensado con la producción de campos cuya producción a la fecha continúa elevándose, entre ellos el ya mencionado Maloob, en la Sonda de Campeche.

Especialmente Pemex tendrá producción incremental en campos como Tsimin Xux, que apenas está despegando. En el último reporte a la Securities and Exchange Commission de Estados Unidos, Pemex le informó que durante 2013 extrajo 40 mil barriles diarios y que espera alcanzar un pico de 144 mil barriles al día. Puede verse que es un complejo gigante, pero sin comparación con los yacimientos descomunales de la época de Echeverría y López Portillo en la década de 1970.

Otro gran proyecto que será desarrollado es Ayatsil Tekel, pero aunque se trata de un volumen in situ cercano a 1 millón de barriles, se trata de aceite muy pesado. El factor de recuperación en este tipo de aceites está debajo del 10 por ciento y Pemex espera desarrollarlo en asociación con alguna empresa extranjera especializada en este tipo de extracciones. Cabe recordar que el estado del arte en esta tecnología es el campo Peregrino, de Brasil, en el cual una alianza de Estatoil y Petrobras logró elevar el factor de recuperación al 20 por ciento, pero demoró casi 1 década en el estudio, diseño y arranque del proyecto. Dada la prisa del actual gobierno por obtener flujo de efectivo es improbable que pueda repetirse la experiencia brasileña en México.

También en la Región Marina Suroeste aún permanecen pendientes de desarrollo unos 10 campos recientemente descubiertos, pero, como hemos repetido, son llamados clase B o clase C, por el escaso volumen de reservas. En suma, aún hay petróleo en México, no se agotará súbitamente en los próximos años; pero la producción será cada vez más disminuida.

Dice el gobierno que la caída será transitoria. Considera la Secretaría de Hacienda y Crédito Público que las lutitas y los campos en aguas profundas lograrán nueva producción y revitalizarán el flujo de efectivo, los ingresos fiscales.

Por ello los bloques que se licitarán en la Ronda Uno el año próximo son en un 90 por ciento de exploración.

La mayor parte de los bloques de explotación son para Chicontepec, donde sin duda los chinos, coreanos o hindúes obtendrán algunos resultados, pero no de la magnitud que proyecta la SHCP.

Considero que la situación actual debe ser conocida. Un diagnóstico correcto es imprescindible.

Fabio Barbosa*

*Investigador en el Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad Nacional Autónoma de México

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Contralínea 409 / del 27 de Octubre al 01 de Noviembre 2014