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Peña Nieto: en picada

Peña Nieto: en picada

A Gabriel Sosa Plata: vertical, valiente, valioso

Nadie detiene la caída de Enrique Peña Nieto. Lo dicen agencias internacionales (Pew Center) y autóctonas.

Parametría, por ejemplo, dice que 57 por ciento de los encuestados reprueba al Ejecutivo federal y 41 por ciento lo aprueba (Animal Político, 1 de septiembre de 2015).

Los principales rubros donde tiene mayores negativos son: generación de empleos, combate al narcotráfico, a la delincuencia y a la pobreza; en los dos últimos asuntos hay un rechazo de 55 por ciento. Es decir, mal, en serio, Luis Videgaray, Miguel Ángel Osorio, Arely Gómez y Rosario Robles (digo yo).

Curioso, en la edificación de carreteras lo apoya el 51 por ciento. Ello tal vez porque no han viajado por los caminos del Estado de México y otras entidades, donde el servicio es muy oneroso y las vías no son de alta velocidad; incluso muchas son de sólo un carril.

Respecto al campo, algo fundamental para la alimentación, 45 por ciento está en contra de lo que se hace y únicamente 28 por ciento a favor. La generación de empleos (saludos, Navarrete Prida), tiene una relación negativa de 58 por ciento y una positiva de 22 por ciento.

El 63 por ciento asegura que Peña no ha hecho lo que se esperaba. Algo que le ocurrió, recordemos, a Vicente Fox. Dos ejemplos claros de que la lectura y el estudio sí importan.

¿La economía ha empeorado en estos casi 3 años? Sí, afirma el 57 por ciento. Además, 39 por ciento tienen claro que no habrá mejoría en dicho rubro.

Nueve de cada 10, es decir, el 90 por ciento, considera al país como inseguro.

En un largo y puntual reportaje (Sin Embargo, 1 de septiembre de 2015), encontramos que de los 266 compromisos que firmó –y dijo que cumpliría en su sexenio–, Enrique únicamente ha cumplido 28, por lo que para hacerlos realidad todos, con ese ritmo, necesitaría 28 años como titular del Ejecutivo.

El más lento de todos es en infraestructura, ya que prometió obras como los trenes rápidos, caminos por todo el país y hasta el aeropuerto, que ya planeado, si avanza rápido, no se terminará en el sexenio actual. La Secretaría de Comunicaciones y Transportes ha cumplido ocho de 154 proyectos.

La primera de sus propuestas, sabemos, fue la comisión nacional anticorrupción, la que será imposible con las propuestas actuales y luego de la burla de la casa blanca.

 

Según el Centro de Investigación y Docencia Económicas, este año creceremos al 2.4 y no al 4.2 como estaba previsto, aunque podría, según otros analistas, aumentar el producto interno bruto (PIB) únicamente 1.7 por ciento.

La organización Mexicanos Primero ha señalado que si tenemos reforma educativa será obra de muchos y no de Enrique Peña Nieto, lo que muestra el desprecio de algunas organizaciones por el Tlatoani.

En la alimentación, se privilegiaron las trasnacionales (Bimbo, Bachoco, etcétera) en lugar de estimular las pequeñas empresas campesinas. Algunos han aportado datos que hasta siembras de narcotraficantes reciben préstamos en lugar de quienes cultivan alimentos fundamentales, entre ellos maíz y frijol, que son el 85 por ciento de los productores agrícolas.

Los micronegocios no están atendidos con suficiente dinero, no obstante que generan el 81 por ciento del empleo y son el 52 por ciento del PIB. Y además, la deuda externa que ahora se ha contratado, influirá en los presupuestos en los próximos 5 años.

Se recortaron cerca de 3 mil 500 millones de pesos en salud, pero se dio 2.5 por ciento más a partidos políticos. Claro, los apoyos en la grilla importan.

Hasta en deporte hay insuficiencias y pésimos manejos. Tanto, que en el Palacio de los Deportes, al inaugurar un encuentro internacional de basquetbol, el encargado del ramo, Alfredo Castillo –antes comisionado en Michoacán–, recibió una silbatina de pronóstico reservado.

En cultura hay estancamiento cuando no retroceso. Y para demostrarlo, el señor Rafael Tovar y de Teresa está al servicio del presidente, ya que hizo una visita guiada a la exposición de Leonardo da Vinci y Miguel Ángel Buonarroti (en la madrugada, sin público) a la pareja presidencial, Enrique y Angélica.

Hacemos declaraciones muy amplias y diversas en ecología, pero la situación interna es desastrosa; se continúan talando, cuando menos, 500 mil hectáreas por año, y está pendiente la iniciativa de la ley del agua, que pretende privatizar el líquido. No se pierda de vista que en Puebla ya es un hecho y las protestas en la ciudad capital y Atlixco son constantes.

Recientemente, Peña Nieto estuvo en Hidalgo e inauguró el mural más grande del orbe y, también, entregó una serie de casas pintadas de varios colores eléctricos, algo diferente a la casa blanca (un abrazo y mi respeto a Carmen Aristegui). Uno de los pobladores hidalguenses presentó una pancarta que decía: “la pobreza no se pinta”. Lo segundo ya lo había realizado el inquilino de Los Pinos en La Pintada, Guerrero, aunque los pobladores se quejaron de que hubo mucho espectáculo por fuera pero “estrechez” por dentro.

Entre las 1 mil propagandas que inundaron prensa, radio, televisión y redes sociales se difundió una frecuentemente: “se entregaron cerca de 1 millón de tabletas a estudiantes”. Pero en algunos lugares no hay electricidad (sic que ilumina).

En el autoelogio en Palacio Nacional, Enrique invitó a más personas que otros años (1 mil 500) y mandó más páginas de informe (Katia D’Artigues), y se vio más eufórico.

Todo va bien.

En un artículo lapidario, “Seguro contra la estupidez”, el doctor Ernesto Villanueva (Proceso 2026) dice que 35 altos funcionarios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y Energía tendrán un seguro, nuevo, para realizar sus funciones, cuyo “monto será de al menos 100 millones de pesos por servidor público”, el cual premia la “impericia”.

¿Recortes por la crisis? Ja.

 

 

Jorge Meléndez Preciado*

*Periodista

[BLOQUE: OPINIÓN]

[SECCIÓN: ARTÍCULO]

TUIT: Gobierno federal, cada vez más desprestigiado

 

 

 Contralínea 454 / del 14 al 20 de Septiembre 2015